Avispas

Avispas y Abejas

Descripción Morfológica

Hasta 30 mm de longitud; ojos arriñonados; dos pares de alas membranosas, las posteriores más pequeñas que las anteriores y unidas a ellas mediante una hilera de ganchos diminutos; alas plegadas longitudinalmente en reposo; piezas bucales adaptadas para masticar y lamer; la superficie dorsal del primer segmento torácico se prolonga hacia atrás en forma de un pequeño lóbulo que solapa la base del ala anterior; abdomen estrechado en la base, que semeja una cintura; metamorfosis completa, con fase de huevo, larva, pupa y adulto; se caracteriza por un sistema social complejo (subfamilia Vespinae). El tamaño de la avispa común (obrera) es de 18 mm de longitud. Géneros: Vespula y Vespa. Aspecto similar. Se distinguen por los dibujos del rostro y del abdomen.

Distribución Geográfica

Anida bajo tierra y en cavidades de árboles y edificios.

Relevancia como plaga

Las avispas pueden considerarse insectos beneficiosos. Los nidos se desarrollan durante la primavera y principios de verano, y las obreras salen en busca de larvas, restos de carne e incluso pescado para alimentar a las larvas. Por tanto, ayudan a controlar las plagas de insectos y a descomponer cadáveres. Las obreras prefieren carbohidratos ricos en energía, que obtienen de las frutas y del néctar de las flores.

Pueden actuar como polinizadores, aunque es improbable que sean tan eficaces como las abejas de la miel. En general, sin embargo, las avispas son vistas como una molestia o una amenaza para la salud. Pese a que se alimentan de fruta como, p. ej., manzanas, peras y ciruelas, se las considera carroñeras y propagadoras de los daños causados por otras plagas y enfermedades. La necesidad de reunir madera para construir nidos significa que las avispas pueden dañar los componentes de madera de los edificios, las cercas e incluso del mobiliario de jardín.

Las avispas resultan especialmente incómodas a finales de verano, cuando las obreras quedan eximidas de recolectar alimento proteínico para los juveniles y pueden dar rienda suelta a su pasión por lo dulce como, p. ej., mermeladas y siropes. Provocan molestias al entrar en las cocinas, panaderías y otros establecimientos en los que se manipulan productos aromáticos dulces. Pueden contaminar los alimentos y molestar o picar al personal.

En sitios con densidades de avispas altas, que constituyan una amenaza real, puede llegar a detenerse la producción en los lugares de trabajo. Lo que preocupa a la mayoría de las personas es la capacidad de las avispas de infligir picaduras dolorosas. Algunos accidentes de circulación inexplicables se han achacado a veces a la distracción de los conductores por la presencia de avispas. No son especialmente agresivas; las avispas sociales pican para defender sus nidos.

El aguijonazo es producto de la inyección de veneno en la víctima a través del ovopositor modificado de las hembras. A diferencia de las abejas, la avispa puede retirar el aguijón de la víctima. El veneno es hemolítico, hemorrágico y neurotóxico. Contiene también histamina, que provoca eritema, inflamación y ronchas en la piel.

Las picaduras de avispa en la garganta pueden provocar obstrucción respiratoria. Por otra parte, pueden tener efectos tóxicos directos y provocar debilidad, disnea, vómitos, diarrea y, en ocasiones, urticaria. Estos síntomas suelen aparecer solamente después de un ataque masivo.

El principal peligro es el riesgo de choque anafiláctico, que puede provocar la muerte a consecuencia de varias picaduras o de una sola. Los síntomas, que pueden presentarse rápidamente, incluyen trastornos respiratorios, debilidad, exantema pruriginoso, inflamación de la cara y vómitos acompañados de dolor abdominal, espasmos o diarrea. Se debe solicitar asistencia médica si se sospecha choque anafiláctico. Las picaduras pueden tratarse con una compresa fría o cremas antihistamínicas aplicadas en un plazo de 20 minutos. Conviene aplicar, asimismo, una crema antiséptica adecuada sobre la piel para evitar infecciones. 


Medidas de control

Las medidas de control pueden ir enfocadas a las avispas que buscan alimento o a sus nidos.

Control de las avispas en busca de alimento.